Un estudio reciente encontró que la pandemia global y los cambios sociales y culturales que la acompañan han tenido un impacto significativo en la salud mental y el estrés de niños y adolescentes. Y los CDC advierten que los niveles de estrés y ansiedad en los niños continúan aumentando. Sin embargo, la ciencia de cómo el estrés afecta la capacidad de un estudiante para aprender y sobresalir en el aula, especialmente cuando se trata de comprensión de lectura, rara vez se discute.
Los maestros que quieran fomentar una comprensión de lectura óptima deben desarrollar una comprensión más profunda de por qué el estrés es tan dañino para la lectura de los estudiantes y qué pueden hacer al respecto.
El creciente problema del estrés estudiantil
No solo aumentan los niveles de estrés en los niños, los investigadores están descubriendo que el estrés y la ansiedad (como otras emociones negativas) son en realidad contagiosos en los niños. Se ha demostrado que simplemente observar a otra persona bajo estrés aumenta los biomarcadores de estrés dentro de ti, y los elementos contagiosos de tus emociones comienzan incluso antes de lo que piensas: un estudio encontró que los niños podían «capturar» el nivel de estrés de su madre.
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, algunos de los desencadenantes de estrés más comunes en los niños incluyen:
- Presión sobre las calificaciones o el trabajo escolar;
- Gestionar todos sus diferentes compromisos, desde la escuela al trabajo pasando por el ocio; y
- Problemas en el patio de la escuela, como intimidación o presión de grupo.