(CNN Español) — La Sala Penal Especial de la Corte Suprema de Justicia del Perú condenó a Kenji Fujimori, exdiputado e hijo del expresidente Alberto Fujimori, a cuatro años y seis meses de prisión por el delito de tráfico de influencias agravado.
Sin embargo, la Sala determinó que la ejecución de la sentencia se suspende hasta que la sentencia sea “firme y/o consentida” en segunda instancia.
En tanto, el excongresista deberá cumplir con medidas como comparecer ante la autoridad judicial correspondiente.
La denuncia que dio inicio a este proceso fue presentada en el Congreso de la República en junio de 2018 por Fuerza Popular, partido liderado por su hermana, Keiko Fujimori, y al que ya había renunciado ese año.
Tras abandonar la audiencia, Kenji Fujimori declinó declarar ante la prensa.
En junio de 2018, Fujimori, entonces congresista, y tres de sus colegas fueron suspendidos de sus cargos por el Congreso peruano tras ser acusados de comprar votos para evitar la destitución del entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski. En su fallo de este martes, la Sala Penal condenó por el mismo delito a los excongresistas Guillermo Bocangel y Bienvenido Ramírez, también a 4 años y seis meses, y a Alexei Toledo a cuatro años, todos con ejecución suspendida hasta que la sentencia sea firme. CNN está buscando reacciones de Fujimori y otros exlegisladores al fallo, pero hasta ahora no ha recibido respuesta.
La denuncia se basó en grabaciones difundidas por Fuerza Popular y que, según parlamentarios de ese partido, supuestamente acreditaban las acusaciones.
La Corte Suprema dijo durante la lectura de la sentencia que los audios presentados como prueba durante el juicio que siguió a Fujimori eran válidos y no habían sido manipulados. El juez leyó la transcripción de los audios para sustentar parte de la sentencia.
Kenji Fujimori rechazó en su momento las acusaciones y dijo que la información fue tergiversada.
Este grupo de congresistas fue suspendido mientras la justicia peruana investigaba la denuncia y tomaba una decisión sobre el caso, lo que ocurrió este martes.
Los congresistas de la oposición presentaron dos mociones de vacante contra el entonces presidente Kuczynski. El primero fue sometido a votación el 21 de diciembre de 2017 por su «supuesta relación con la empresa Odebrecht», por lo que el entonces mandatario fue acusado de «incapacidad moral», mecanismo contemplado en la Constitución, pero no alcanzó los votos necesarios. . destituirlo de la Presidencia.
La segunda moción fue presentada en marzo de 2018 por la supuesta compra de votos que, según los parlamentarios de Fuerza Popular, Kenji Fujimori y otros congresistas realizaron para evitar la vacancia de Kuczynski, quien el 24 de diciembre de 2017 otorgó un indulto humanitario a Alberto Fujimori, expresidente que había sido condenado por delitos cometidos durante su gobierno.
Tras negar esa compra de votos, Kuczynski renunció a la Presidencia en marzo de 2018, luego de que se presentara la segunda moción de vacante en su contra, pero antes de que se votara.
Kuczynski dijo entonces que no quería «ser piedra de tropiezo» y que no quería que «ni el país ni su familia siguieran sufriendo con la incertidumbre de los últimos tiempos».
En abril de 2018, Kuczynski le dijo a CNN que “ni un solo puesto, ni un solo dólar, nada” se había ofrecido en esos procesos de vacantes.
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